¿QUÉ ES UN TRATADO DE LIBRE COMERCIO (TLC)?

Un tratado de libre comercio es un acuerdo entre dos o más países que tiene como objetivo reducir las barreras de importación y exportación entre ellos. Bajo una política de libre comercio, los bienes y servicios pueden comprarse y venderse a través de las fronteras con aranceles, cuotas, subsidios o prohibiciones gubernamentales mínimos o nulos que impidan su intercambio.  

La idea de libre comercio se contrapone al proteccionismo comercial o a la ausencia de intercambios económicos.

 

La economía del libre comercio 

En principio, no existe diferencia entre el libre comercio a nivel internacional y las transacciones entre vecinos, naciones o países. Sin embargo, permite que las empresas de cada país se concentren en producir y vender bienes que hagan el mejor uso de sus recursos, mientras que otras empresas importan bienes que son escasos o no están disponibles en el país. Esta combinación de producción local y comercio exterior permite que las economías experimenten un crecimiento más rápido y respondan mejor a los consumidores. 

El economista David Ricardo popularizó por primera vez esta perspectiva en 1817 en su libro Principios de economía política y fiscalidad. Argumentó que el libre comercio amplía la diversidad y reduce los precios de los bienes disponibles para una nación al tiempo que hace un mejor uso de sus recursos, conocimientos y experiencia locales. 

 

Desventajas

• La competencia con las exportaciones extranjeras puede provocar desempleo local y quiebras comerciales.  
• Las industrias pueden mudarse a jurisdicciones con regulaciones laxas, causando daño o abuso ambiental.  

 

 Ventajas  

•  Brinda a los consumidores acceso a los productos más baratos del mercado mundial.  
•  Permite que los países con mano de obra o recursos relativamente baratos se beneficien de las exportaciones extranjeras.  
•  Según la teoría de Ricardo, los países pueden producir más bienes juntos comerciando en beneficio de sus intereses. 

 

Ejemplos reales de tratados de libre comercio:

Hoy, la Unión Europea es un importante ejemplo de libre comercio. Los estados miembros forman una unidad comercial única, esencialmente ilimitada, y la introducción del euro en la mayoría de ellos abre aún más el camino. Cabe señalar que este sistema es administrado por una burocracia con sede en Bruselas, que tiene que resolver muchos problemas comerciales que surgen entre los representantes de los estados miembros. 

 

¿Qué es un área de libre comercio? 

Un área de libre comercio es un grupo de países que han acordado mutuamente reducir o eliminar las barreras comerciales en la región. De esta manera, los países participantes pueden beneficiarse de tarifas reducidas mientras mantienen sus protecciones actuales en el comercio con países fuera de la región. 

 

Opiniones públicas sobre el libre comercio 

Pocos asuntos generan tanta discusión entre economistas y la población como el comercio libre. Los economistas universitarios estadounidenses tienen siete veces más probabilidades que el público en general de apoyar las políticas de libre comercio, según muestra una investigación. De hecho, el economista estadounidense Milton Friedman dijo: “La Administración Económica fue casi unánime en su conveniencia del libre comercio”. 

Las políticas de libre comercio no eran tan populares entre el público en general. Los principales desafíos son el concurso injusto de países con gastos laborales más bajos permitiendo costos más reducidos y la erosión de puestos de trabajo mejor remunerados para los fabricantes extranjeros. 

El llamado del público a comprar productos estadounidenses puede decaer con los vientos políticos, pero nunca será silenciado. 

 

La visión desde los mercados financieros 

Sin duda, los mercados financieros tienen una perspectiva diferente. El intercambio libre es una oportunidad para ampliar la exposición de los productores de la nación a otros países.  

Además, el libre comercio es ahora un componente esencial del sistema financiero y el sector de las inversiones. Los inversionistas estadounidenses ahora tienen acceso a la mayoría de los mercados financieros extranjeros y a una mayor variedad de valores, divisas y otros productos financieros.  

Sin embargo, el libre comercio en los mercados financieros es poco probable en nuestro tiempo. Existen numerosas entidades reguladoras transversales para los mercados bursátiles mundiales.